¿Somos libres? ¿Podemos elegir a nuestra voluntad? ¿Somos conscientes de todo lo que hacemos?

Don Quijote en la foto ataca a molinos creyendo que son gigantes. ¿Pero actúa desde su propia decisión o desde su locura? Y esto nos lleva a otra pregunta ¿los molinos eran gigantes? Para él sí, para Sancho Panza no y para nosotros tampoco
¿Entonces cuál es la realidad, la suya o la nuestra? ¿O las dos a la vez?

El cerebro funciona en un juego de sistemas. Con el interior y el exterior. Imaginemos un niño con TDAH o trastorno de Atención e Hiperactividad. Esto le lleva a tener problemas de atención y de comportamiento. Parece obvio que el niño no lo tiene porque quiere. Lo tiene por un desequilibrio en sus sistemas cerebrales. Normalmente, los padres están desesperados, lo cual pone más nervioso al niño. Y entran en un círculo vicioso. Pero la pregunta que hago ahí ahora es ¿dónde fijamos el tratamiento ? Obviamente hay un problema biológico, pero el origen puede ser el divorcio de los padres, o la obsesión de estos por las notas o que no le hacen caso por un hermano enfermo…. Si decidimos darle medicación, esto tendrá unos efectos secundarios, y además atacaremos en mucho casos el síntoma no la enfermedad. El Niño puede tener efectos secundarios debido a la medicación y mejorar o no mejorar su comportamiento. Podemos hacer terapia, pero actuamos sobre su conducta y eso influye en su biología ¿pero lo hace lo suficiente? ¿Es definitivo? Sabemos que por nuestra propia conciencia de los hechos podemos cambiar nuestra neurobiología. Podemos hacer tratamientos integrales, como por ejemplo neurofeedback (que no tiene efectos secundarios), técnicas de concentración y terapia familiar. Esto nos da un mayor ataque a todos los frentes. El cerebro actúa como un sistema biológico, que se retroalimenta entre diferentes áreas y que se ve influido por algo llamado mente, que es la forma en la que percibimos la realidad, que a su vez influye en nuestro cerebro. En mi opinión nuestro margen de libertad es escaso pero suficiente para que podamos sentir que tenemos el control de nuestra vida sin sufrir ni hacer sufrir. Lo contrario es la psicopatología y como la tratemos será vital. NO DEBEMOS CONFUNDIR LA ENFERMEDAD CON EL SÍNTOMA

El cerebro funciona como un sistema para percibir y decidir. Ese es el objetivo básico de este. Imaginemos que sintiéramos solo un estímulo, por ejemplo, un ruido fuerte de algo que ha caído.

Ahora vamos a valorar el cerebro como un sistema, con un conjunto de subsistemas. En este caso diferenciamos tres;
A.-Cerebro reptiliano. Coincide con el troncoencéfalo, al la altura de la nuca, y le llamamos cerebro reptiliano, Regula la homeostasis del organismo y respuestas instintivas ante el peligro. B.-Cerebro mamífero o límbico. Regula las emociones aprendidas, valora lo que es bueno o malo en función de las experiencias vividas. Mientras que el anterior es parecido en sus reacciones en todos los humanos este se basa más en las experiencias. C.-Cerebro humano o cortical. La parte frontal de nuestro cerebro al estar muy desarrollada nos da la percepción de self o de quienes somos. Esta parte actúa como un freno de las otras dos y madura muy tarde, alrededor de los 20 años. La compartimos con otros animales pero en nosotros esta hiperdesarrollada.

Volvamos al incidente. Se ha caído algo y hemos oído un ruido muy fuerte, El cerebro reaccionará de forma diferente porque cada uno de los sistemas tiene sus propias percepciones y evaluaciones.
A.- El cerebro reptiliano percibe un ruido que indica peligro y nos sobresalta. Damos un salto en la silla y sentimos taquicardia y la respiración agitada, nos sentimos en alerta.
B.- El sistema límbico recuerda ese ruido como el de un objeto que se rompe en el suelo. Es desagradable pero no lo valora como demasiado peligroso y manda la señal al córtex para valorarlo.
C.- Recordamos que dejamos un jarrón mal colocado en la cocina y que probablemente se ha caído por culpa nuestra. Nos decimos que somos unos inútiles y nos enfadamos con nosotros mismos. Decidimos ir a barrerlo.

Esto que he expuesto serían respuestas normales. En mi opinión la patología psicológica viene de una interferencia entre estos sistemas, entre otros. Es decir, cuando hay estímulos si los tres sistemas no se encuentran alineados se darán reacciones que nos harán sentir que no tenemos el control de nuestras reacciones o daremos respuestas inadaptativas. Algunos ejemplos serían:

A.- Se escucha el ruido y me quedo inmóvil y no me puedo mover o me hiperactivo y no puedo para de sentirme inquieto. La taquicardia no baja aunque sé que no ha pasado nada grave.
B.- Empiezo a llorar de forma frenética y siento mucho miedo y no sé porqué… no entiendo porque me pasa esto.
C. Me insulto por ser una inútil y no hacer nada bien.. y dejó el jarrón roto en el suelo sin recoger porque me siento sin fuerzas…

Si los tres sistemas funcionan de forma adecuada, las evaluaciones de la realidad y las acciones serán idóneas y adaptativas, pero sino encontraremos problemas de regulación emocional, que al solucionarse de un modo equivocado agravan el problema.