Voy a hablar de la regulación emocional pero desde la neurobiologìa. Este concepto es muy simple pero a la vez muy complejo.
Que significa “regulación emocional” ?
Pues responder de forma adecuada y proporcionada a los estímulos ambientales y a los propios, o sea las sensaciones.

Esta regulación se aprende principalmente en el primer año de vida y después se va consolidando. Como ocurre?

Por la espalda tenemos dos nervios que llamamos “simpático” y “parasimpatico”.
El sistema simpático es un activador de energía que provoca excitaciòn y movimiento. Se relaciona con las situaciones de lucha/huida.
El sistema parasimpático conserva la energía. Está relacionado con estar inmóviles, por relajación o por miedo. Y es un sistema de conservación de energía.
Este sistema funciona como tantos otros en el cuerpo por “opuestos”, si uno sube el otro baja. Aunque hay una excepción terrible que comentaré en otro post.

Ahora imaginemos un bebé de un año, que su papá juega con él tirándolo al cielo y cogiéndolo cuando cae. El Niño se ríe a carcajadas y disfruta de la sensación de miedo y seguridad que se da. Es excitante y divertido.
La mamá llega y coge al bebé para bañarlo y no quiere, esta pasándolo bien y quiere seguir, pero la mamá lo calma y lo baña. El bebé come algo y cae profundamente dormido mientras alguno de los papás lo mece y el bebé exhausto cae rendido.

Esto es REGULACIÓN EMOCIONAL, uno excita el sistema simpático (juego, peligro, excitaciòn) y otro el parasimpatico (limpieza, comida, calma) de forma adecuada.

Esto REGÚLA el sistema nervioso en un juego de equilibrios que permite aprender a excitarse y calmarse de forma adecuada.

Pero el Niño no puede regularse solo debe hacerlo con unos cuidadores que estén regulados a su vez. Y que le ayuden a aprender a hacerlo. Pasado un tiempo El Niño podrá AUTOREGULARSE de forma sana tanto con sus cuidadores como solo o con objetos, y otros niños.El cerebro y el corazón están unidos y no lo digo de forma metafórica sino literal. El Sistema nervioso autónomo (SNA) regula los ritmos de los diferentes órganos (vísceras). El simpático provoca el aumento de los latidos (taquicardia), perdida de salivación, sudoración, etc… mientras que el parasimpático produce lo contrario: bradicardia, calma, etc…

Existe también una relación directa entre cada uno de los hemisferios y cada una de las ramas del SNA. Cito literalmente a Craig en su libro ¿How do you feel?: “… La rama parasimpática está relacionada con conductas apetitivas (de aproximación y bienestar) en el hemisferio izquierdo. La rama simpática está relacionada con conductas aversivas o de desincentivación y está conectado con el hemisferio derecho en todos los vertebrados…”

El hemisferio derecho de los bebes madura en TOTAL SINCRONIZACIÓN con el hemisferio derecho de la mamá, esta lo activa mediante la prosodia (lenguaje repetitivo y suave), miradas, juego, tacto, etc…

Esto significa que la mamá y posteriormente el papá, activan el desarrollo de el hemisferio derecho (que sabemos que es el que contiene la parte principal de las memorias emocionales y valora los inputs emocionales internos y externos). Los padres ayudan a desarrollarlo de forma adecuada junto con la maduración de la rama parasimpática del SNA, y para aprender a manejar la simpática, lo que conocemos como AUTOREGULACIÓN.

La paradoja es que los padres al conectar con el hemisferio derecho del niño producen efectos de calma sobre la rama simpática que si no tomaría el control del sistema, haciendo que este no pueda aprender a calmarse (autoregularse). Quizás esto explique porque niños severamente abusados o en orfanatos (abandonados) sean incapaces de controlar sus impulsos.

Al producirse esto, no solo se coordinan las miradas, sonrisas etc, de la mama y el bebe sino también se sincronizan los latidos del corazón y la respiración. Este ritmo adecuado de los latidos es el mayor antídoto contra la ansiedad y la depresión, puesto que el ritmo cardiaco regula a su vez la respiración, la digestión, el metabolismo y se cree que incluso el sistema inmunitario, etc…

Es en el primer año de vida donde el niño aprende a regularse emocionalmente en COREGULACIÓN con el sistema nervioso de los padres, y no olvidemos que estos aprendizajes inconscientes se mantienen durante toda la vida.

Por eso hay que cuidar de los padres para que puedan cuidar de sus hijos…